Frases de la semana: Buenos muchachos

En esta semana les comparto las frases de una película  dirigida por Martin Scorsese, acerca de la mafia italiana en new york, que muestra el ascenso y la caída del protagonista de la historia comenzando como un ladronzuelo hasta convertirse en todo un gangster adicto y vendedor a la cocaína, esta película explora las reglas y tradiciones del crimen organizado y como la "buena vida" se puede convertir en un mundo de bendiciones y tropiezos.

Disfrútenlas y si tienen tiempo busquen la película, que está muy bien lograda en guión e interpretaciones.

• Oye, Jimmy, lo correcto es lo correcto ¿entiendes lo que te digo?.
• Tarde o temprano a todos nos golpean.
• Después de un tiempo, llego a parecerme normal, nada parecía un delito; era como si Henry fuera un empresario y él y los otros ganaran dinero haciendo trampa, mientras que los otros estaban sentados esperando las sobras.
• Aceptaste tu primer arresto como un hombre, y aprendiste las dos cosas esenciales: jamás delatar a tus amigos... y mantener la boca cerrada.
• Cuando estaba en quiebra, solamente, salia a robar más.
• Las personas que te han cuidado toda la vida, siempre parecen llegar en el momento en que tú te sientes más débil y más necesitado de su ayuda.
• Para nosotros, los demás estaban locos. Para nosotros, esa gente buena con salarios que trabajaba todos los días y se preocupaba, estaba muerta. 
• El Dr. Wellsler está aquí. Me dio 6 meses de vida. Como no podía pagar me dio 6 meses más.
• El estar siempre juntos hacía que todo pareciera más normal.
• Cero divorcio. No somos animales.
• A Gribbs le dieron 20 años por saludar a un cretino que vendía drogas.
• ¿No te dije que no hicieras nada que llamara la atención? Uno compra un Cadillac, y otro, un abrigo de visón.
• Se porta como un pendejo. Nadie le hace caso. Nadie le presta atención, habla mucho.
• Eso fue lo que me dio. $3.200 por toda una vida. No alcanzaba ni para un ataúd.
• Busquen ladrones en la Bolsa.
• Y ahora se acabó. Eso es lo más difícil. Hoy todo es diferente. No hay acción. Tengo que esperar como todos los demás. Soy un infeliz cualquiera.